sábado, mayo 05, 2007

HUELGA FORESTAL INDEFINIDA DEJA HERIDOS Y UN TRABAJADOR ASESINADO POR CARABINEROS




Este lunes 30 de abril, más de 5000 trabajadores de la empresa Bosques Arauco, perteneciente al grupo Angellini, toma la histórica decisión de irse a paro Indefinido

Ante la política divisionista del empresariado que ha intentado dividir la unión de la organización sindical entre trabajadores de primera y de segunda, los trabajadores de la forestal enfrentaron con sus propios métodos al empresariado explotador

Uniendo fuerzas con los trabajadores permanentes y subcontratados lograron agruparse en una sola Coordinadora que los días 12, 13 y 14 de Marzo declararon un paro total de actividades. De esto nacieron nuevos sindicatos y se logro imponer la voluntad de los trabajadores de una negociación colectiva en los hechos.

Este paro correspondió a mejores en las condiciones de trabajo y en los salarios. Un aumento de 40% de los salarios para todos los trabajadores en una empresa donde se llegan a pagar salarios de 40 mil pesos. Ante la unidad mostrada por los trabajadores, la empresa accedió a negociar con ellos, en una mesa de negociación que se extendió por 45 días. De estas 23 demandas, se acordaron 21, pero no las salariales. La empresa ofrecía apenas un 4,5%

Bosques Arauco es la misma empresa que el 2006 tuvo ventas por más de 2 mil 850 millones de dólares, con una ganancia de 619 millones de dólares,
Equivalente a casi 2 millones de dólares diarios de ganancia, aumentando 41% respecto al 2005. Y en este primer trimestre de 2007, lleva 228 millones de dólares de utilidades, volviendo a aumentar con respecto al 2006, en un 30%.

Es por eso que los trabajadores decidieron comenzar una huelga indefinida con tal de lograr sus reivindicaciones.

Sin embargo, el día de hoy mas de dos mil trabajadores mantenían cortado todo el transito desde hace 5 horas en la ruta 169. Los explotados, ya cansados de esperar más negociaciones, se manifestaban alterando el orden del capitalismo que los explota. Una manera de desequilibrar la relación de fuerzas que los empresarios siempre logran regular. Y es así como en medio de fuertes enfrentamientos que se registraban esta noche entre la policía y los trabajadores que realizaban corte de vías y toma de la ruta que colinda la planta Horcones, resultaron varios heridos y un trabajador fue muerto por la policia. En primera instancia el trabajador habría querido con una grúa quitar del camino a un auto de efectivos policiales, acción que fue devuelta por la policía con disparos. El trabajador murió en el lugar, y pasada las 22:hrs. su cuerpo permanecía al interior de la maquina pesada, mientras los incidentes continuaban.

SI DESEAS CONSULTAR MAYOR INFORMACION, SOBRE LAS DISTINTAS MOVILIZACIONES EN SOLIDARIDAD CON NUESTRO HERMANO DE CLASE ACRIBILLADO POR LA POLICIA Y SOBRE LAS DISTINTAS ACCIONES DE REPUDIO A UN ESTADO QUE DEFIENDE SUS INTERESES EN BASE A PLOMO Y REPRESION. INGRESA A:
www.hommodolars.cl

Agradecemos los afiches realizados por los camaradas de la Unidad Muralista Luchador Ernesto Miranda UMLEM.
www.fotolog.com/_umlem
www.pintaylucha.blogspot.com

NUESTRO MEJOR HOMENAJE ES SEGUIR LUCHANDO. RODRIGO CISTERNA PRESENTE!!!

A IMPULSAR LA PROTESTA NACIONAL!!!




jueves, mayo 03, 2007

Peña por la vivienda digna - V Región


PEÑA POR EL DERECHO A LA VIVIENDA DIGNA!

Viernes 4 de Mayo
En las escuela de derecho de la Universidad de Valparaíso
Desde las 21:00 Hrs
Cantores populares, música en vivo y envasada, pilsen, navega'o, sopaipas y mucho más

Arriba los que luchan!

INVITA: Comité de Allegados Vivienda digna
APST - V REGIÓN

martes, marzo 06, 2007

DIA NACIONAL DE LOS SIN TECHO



A DETENER LA ESPECULACION DEL SUELO URBANO!!!
POR LA UNIDAD DE LOS ALLEGADOS EN LUCHA, LUCHA DIRECTA POR LOS TERRENOS!!!

sábado, noviembre 04, 2006

Demandas y Propuestas para la Segunda Movilización de APST-Chile

La primera oportunidad en que, como Agrupación de Pobladoras y Pobladores Sin Techo, nos dirigimos al Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y al Serviu, fue para plantear formalmente una serie de inquietudes y propuestas acerca de las Políticas Habitacionales en nuestro país.

Evidentemente, uno de los temas más conflictivos fue el problema del acceso de los pobres a los terrenos urbanos. En este asunto, el Minvu y el Serviu tienen una responsabilidad innegable, pues han postergado permanentemente su labor de planificación urbana y no han tenido ninguna vergüenza en fomentar y beneficiarse de la especulación con los terrenos, mientras miles de familias no tienen un lugar para vivir.

Frente a esta situación, nuestra propuesta consistió en exigir a estos organismos gubernamentales que implementaran una política de expropiación amable de terrenos desocupados en cada comuna, para construir viviendas para los pobladores allegados. La respuesta que recibimos fue que la expropiación no estaba dentro de los planes del Minvu y el Serviu, y que el asunto se podía resolver de otro modo. Se ofrecieron para apoyar el proceso de acceso a terrenos para nuestra agrupación, mediante asesoría técnica, negociaciones con propietarios, etc.; mientras nosotros nos ocupábamos de recopilar datos y antecedentes de los terrenos disponibles en cada comuna, para evaluar la factibilidad técnica y económica de hacer uso de ellos.

Hasta la fecha, hemos presentado, al Serviu, una buena cantidad de terrenos con los antecedentes respectivos, los cuales han sido visitados por miembros de nuestra agrupación en conjunto con el Sr. Juan Morales (Serviu). De todos estos terrenos potenciales, no ha habido absolutamente ninguno con el cual hayamos podido avanzar para concretar una solución habitacional para los pobladores.

El primer problema con que nos hemos encontrado ha sido la imposibilidad de aplicar el Subsidio a la localización. Cualquier terreno, para recibir este subsidio, debe cumplir con una serie de requisitos (estar a no màs de 1500m de un consultorio, no más de 800m de un establecimiento educacional, contar con determinadas vías de acceso, contar con locomoción colectiva y encontrarse dentro del límite urbano). Si el terreno cumple con todos estos requerimientos, debe además tener un valor comercial inferior a 1,8 UF/m2, pues el subsidio no alcanza para terrenos más costosos, entre otras cosas, porque el monto que se entrega (máximo 150 UF) se calcula en proporción al valor fiscal del terreno, que siempre está muy por debajo del valor comercial. En definitiva, el Subsidio a la Localización no presenta, en términos concretos, una alternativa viable para el acceso de los pobres a los suelos urbanos, pues, después de dos meses de búsqueda, hemos comprobado que los terrenos que cumplen con todos los requisitos son muy escasos.

El segundo problema que se nos presenta, en caso de encontrar un terreno que pueda ser postulado para recibir el subsidio a la localización, es el Compromiso de Compra y Venta.

La única manera de garantizar que un terreno determinado se encontrará disponible para los pobladores al momento de recibir su subsidio habitacional, es firmando un compromiso de compra y venta con el propietario. Éste exige, para esto, el pago inmediato de un porcentaje determinado del valor comercial de la propiedad, lo que presenta un tremendo obstáculo, pues ningún poblador se encuentra en condiciones de desembolsar esa cantidad de dinero (el ahorro previo de 10 UF ya implica bastante esfuerzo). Nuestra única posibilidad de comprar el terreno está en esperar la asignación de los subsidios habitacionales, pero para entonces el terreno, seguramente, se habría vendido.

En resumidas cuentas, no existe ninguna garantía de terrenos disponibles para los pobladores, y el gobierno, a través de sus organismos de planificación habitacional, ofrece alternativas que son muy difíciles de aplicar. Se nos imponen una serie de condicionantes de tipo técnico para optar a los suelos para viviendas, cuando en realidad, el problema proviene de la falta de voluntad política, por parte de nuestras autoridades, para responder a la demanda habitacional de nuestra población.

Ya han transcurrido dos meses de conversaciones con el Serviu, en que hemos cumplido con todos los pasos que nos han solicitado, y no hemos logrado ningún avance sustancial hacia los terrenos que necesitamos. Podemos continuar varios meses más en la misma dinámica, a menos que seamos capaces de dar un nuevo impulso, un nuevo llamado de alerta al gobierno y a la opinión pública, con más fuerza y convicción en la legitimidad de nuestra lucha, para que esta vez no quepa duda alguna de que, cuando decimos que vamos a luchar por nuestra vivienda digna, hablamos en serio.

Es por esta razón que hemos decidido realizar una nueva movilización, una marcha hacia La Moneda y luego hacia el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, con el objeto de comunicar al gobierno nuestras demandas e instalarlas decididamente en la opinión pública, y exigir que se evalúe seriamente nuestras propuestas:

1. Separación de la postulación al subsidio habitacional del Fondo Solidario en:
Una primera postulación al Subsidio a la Localización, de manera que los comités de allegados puedan recibir el dinero para realizar el compromiso de compraventa de los terrenos lo antes posible.

Y una segunda postulación para recibir el subsidio para la construcción de la vivienda, presentando el proyecto habitacional teniendo la garantía de un terreno adecuado.

2. Compromiso del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, del Serviu, y de todos los organismos estatales de planificación, de aplicar el artículo n° 50 de la Ley y Ordenanza General de Urbanismo y Construcción, el cual autoriza al Serviu a modificar el uso de suelo de un terreno para la ejecución de un proyecto de dicho organismo, entendiendo como “proyecto Serviu” todo proyecto que reciba el subsidio habitacional del Fondo Solidario de Vivienda. El objetivo de esta propuesta es garantizar que, en caso de existir terrenos disponibles para los proyectos habitacionales, que cumplan con todos los requisitos para postular al Subsidio a la Localización, el uso de suelo asignado por el Plan Regulador no sea un impedimento para que los comités de allegados puedan obtenerlos.

3. Aumentar el Puntaje máximo para la postulación al Fondo Solidario, en la Ficha CAS, a 650 puntos, para disminuir el número de familias que se ven obligadas a endeudarse con la Banca privada para poder acceder a su vivienda digna.

4. Que el Serviu asuma su labor como Entidad de Gestión Inmobiliaria Social (EGIS), para la postulación de los proyectos habitacionales al Fondo Solidario de Vivienda, de manera que, en la elaboración, ejecución y fiscalización de éstos, los pobres dejen de estar a merced de las empresas privadas.


¡Para vivir con Dignidad, a conquistar lo que es Nuestro!
Agrupación de Pobladoras y Pobladores Sin Techo

domingo, septiembre 17, 2006

APST exige responsabilidad, coordinación y compromiso al Serviu

El jueves 14 de septiembre, dirigentes de APST-Chile se reunieron en las oficinas del Serviu con el director de dicho organismo, Ricardo Trincado, y Juan Morales, encargado de tasación, para hacer un balance de los acuerdos que se habían pactado, exigir una aclaración con respecto a la factibilidad de que el Serviu sea la entidad organizadora para los primeros proyectos de la agrupación y un compromiso para apoyar las negociaciones entre los/as pobladores/as y los propietarios de los terrenos.

En la reunión sostenida en el Ministerio de Vivienda y Urbanismo tras la movilización del pasado 30 de agosto, quedó zanjado que el Serviu visitaría y estudiaría los terrenos que los pobladores han propuesto para la construcción de viviendas en cada comuna. En efecto, eso ha ocurrido en Maipú, Peñalolén y La Florida, no así en Huechuraba y Puente Alto, donde los funcionarios gubernamentales se ausentaron. En el caso de Puente Alto, no hubo excusa alguna y el error fue consecuencia de una descoordinación interna del servicio.

La explicación de Ricardo Trincado dejó en evidencia la falta de compromiso y responsabilidad con que todavía está abordando el Gobierno el problema de los/as allegados/as: “yo no le comuniqué a Juan (Morales) de esa salida en particular”. Otro problema expuesto, fue la mala disposición que algunos funcionarios presentan al momento de visitar los terrenos, quienes con suerte se bajan del automóvil a “echar un vistazo” a los terrenos potencialmente edificables.

CUESTIÓN DE VOLUNTAD POLÍTICA

APST fue clara al momento de enfatizar la necesidad de crear un mecanismo de solución al problema de la negociación entre los pobladores y los propietarios de los terrenos. Estos últimos especulan sin tapujos los precios de la tierra, sepultando de esa manera los esfuerzos de cada comité y abriéndole las puertas para el negocio a las inmobiliarias y las grandes constructoras. En ese sentido, APST exigió una respuesta concluyente respecto a lo manifestado por la subsecretaria Paulina Saball en la última reunión: que el Serviu asumiera el papel de entidad organizadora.

En un principio, Trincado se manifestó contrario a la idea, pero luego reconoció que el reglamento deja abierta esa posibilidad al Servicio otorgándole también la facultad de comprar terrenos. En ese escenario los recursos no serían problema. El tema que estaría complicándolo todo es si compran terrenos para comités específicos o compran un “stock” para repartir. Es decir, una cuestión de mera voluntad política que el Serviu deberá abordar desde ya si es que verdaderamente pretende solucionar el drama de los/as allegados/as.

El Serviu argumentó que el repartir los terrenos entre cada comité implicaría un caos que no estarían dispuestos a asumir, ante lo cual los dirigentes de APST respondieron al unísono que “la distribución de los terrenos no puede ser un impedimento” y recalcaron, además, que hoy el principal escollo no es la organización de los/as allegados/as, sino los altos precios de los compromisos de compra-venta y la desigual competencia con los particulares especuladores y las grandes empresas privadas.

lunes, septiembre 04, 2006

Por un Sueldo Mínimo Digno

¿Es digno ganar 135 mil pesos mensuales?. Claramente no lo es. Cualquiera que gane menos de 200 mil pesos mensuales vive en condiciones miserables. Lamentablemente esta es la realidad de millones de trabajadores y sus familias (prácticamente el 80% de los chilenos). ¿Qué pasa cuando no ganas lo suficiente para vivir? La respuesta es fácil y lamentable: endeudarte.

Según estudios de los propios centros de análisis de la élite gobernante de este país, las familias de los sectores populares, sólo en locomoción y dividendo gastan casi un 60% de su salario. Agreguemos a lo anterior, la alimentación, vestuario y gastos por servicios básicos como luz, agua y gas; obviamente si ganas el mínimo o incluso si ganas un poco más, digamos 160 mil pesos mensuales (alrededor del 60% de los trabajadores chilenos ganan alrededor de esa cifra), igual tu sueldo no te alcanza para vivir dignamente.

Ante esta situación ¿qué es lo que podemos hacer como clase afectada si sabemos que ni el gobierno ni la llamada oposición (derecha) tienen la menor intención de cambiar la miseria de la mayoría de los trabajadores y sectores populares? A ellos no les importa el que la mayoría de la población nos encontremos viviendo en condiciones miserables, al contrario, a ellos les conviene que así sea la cosa, ya que mayor riqueza acumulan a costa de nosotros/as.

Mantener la distribución de las riquezas de forma tan desigual hace que ellos tengan grandes beneficios. Por ejemplo, los diputados ganan en promedio 8 millones de pesos mensuales, por trabajar dos días a la semana; los banqueros y empresarios ganan cifras astronómicas, entonces ¿crees que a ellos les conviene igualar la balanza? A toda esta gente sólo le interesa mantener las cosas tal como están.

Ante esto la tarea que tenemos como trabajadores, pobladores, estudiantes, cesantes, jubilados, allegados, deudores habitacionales, dueñas de casa y de todos los que sufrimos las "bondades" del capitalismo -bajo su rostro neoliberal-, es organizarnos y tratar de articularnos para aunar fuerzas. De lo contrario y si no te preparas para movilizarte y luchar, ninguno de tus sueños se cumplirá, ni para tí, ni para tus hijos/as. Si sigues esperando que los políticos mentirosos hagan algo por ti, puedes armarte de paciencia y sentarte a esperar eternamente.

Vivimos 17 años de dictadura militar en la cual se implantó el sistema neoliberal en nuestro país. Bastaron 16 años y medio más para que este se hiciera carne. El problema básicamente radica en que los mismos empresarios que promovieron y gobernaron con la dictadura, son los mismos que siguen gobernando con la Concertación y el modelo económico neoliberal que impuso la dictadura, a sangre y fuego, el mismo modelo económico que sigue aplicando la Concertación.
Bajo la dictadura se nos dijo que la gran contradicción era "dictadura o democracia", que los problemas de miseria que teníamos bajo el régimen militar se debían a la falta de democracia, después de casi 17 años de "democracia". ¿Cuánto ha cambiado tu nivel de vida?

Todos/as ellos hablan en nombre del "pueblo", o sea, en nombre de nosotros/as. El problema es que no quieren bajarse de nuestros hombros. Llego la hora de terminar con que ellos sigan hablando por nosotros, tenemos que tener nuestra propia voz. Necesitamos organizarnos y luchar por un sueldo mínimo digno.

Coordinadora por un sueldo digno

Movilización Región Metropolitana


Dicen por ahí -y con mucha razón- que el instrumento fundamental que tiene nuestra clase, la de los sin techo, la de los trabajadores que echan a andar este país, es la movilización, y así quedó demostrado en nuestra primera manifestación en las calles por el centro de Santiago. A la convocatoria llegamos a eso de las 10ºº vecinos y vecinas de seis comunas de la Región Metropolitana: Puente Alto, Peñalolén, Huachuraba, Conchalí, La Florida y Maipú. Llegamos con carteles, lienzos, chapitas, volantes y los pulmones llenos para gritar cánticos. Nos acordamos de los/as vecinos/as de APST de la Quinta Región que a esa misma hora se movilizaban a su SERVIU regional, y nos acompañaba un vecino de APST de la Octava Región quien dirigió algunas palabras de apoyo y ánimo para esta articulación a nivel nacional.

(Como era de esperarse los “efectivos” policiales se hicieron presentes desde tempranito, incluso antes de que llegara el megáfono)

Una vez que ya todas las comunas habían llegado (alrededor de 200 personas) nos preparamos para movilizarnos del lugar con el objetivo de llegar a las dependencias de SERVIU. Hicimos un dinámico recorrido dando a conocer a la opinión pública que la lucha de los "sin techo" sigue en pie con críticas y propuestas para la generación de viviendas dignas, diciéndole no a las casas chubis, no a las casas enanas, no a las casas que se llueven y no a irnos fuera de nuestras comunas por el sólo hecho de no tener dinero para comprar casas de 2000 UF (hacia arriba), diciéndole sí a la organización, expresando que nuestra lucha es más grande que la casa, nuestra lucha es para cambiar las condiciones materiales de existencia que nos tienen en la miseria.

Así llegamos al SERVIU, el Director Regional Metropolitano, el señor Trincado nos estaba esperando. Había dado la orden que sólo 4 de nosotros entraran a conversar con él, nosotros le dijimos que no porque somos 6 comunas, así que no le quedó otra que aceptar. La reunión duró aproximadamente una hora y media (o tal vez más), mientras tanto todos dábamos fuerzas desde afuera y también lanzamos la anhelada rifa, porque no somos la rifa del huevo pero sí la del DVD, obviamente el o la vecina que faltó a la movilización se iba directamente al agua.

Una vez que nuestros vecinos y vecinas salieron de la reunión nos contaron que se presentaron los terrenos que habíamos estudiado y en los cuales podrían construirse nuestras casas. Y así amarramos la tarea que al corto plazo SERVIU junto a nosotros iríamos a visitar los terrenos propuestos, y ver si es o no factible nuestro proyecto habitacional. Ahora bien, nosotros sabemos que los terrenos son carísimos, por lo tanto, seguiremos con una de nuestras principales banderas de lucha que es la expropiación de terrenos en las comunas por parte del SERVIU... si quieren ponerse, entonces que se pongan bien, o no?

Nuestra lucha es más grande que la casa!!

Movilizaciones en la Quinta Región

Solo la lucha da lo que los ricos nos niegan”. Es un hecho. Llevábamos dos meses esperando la respuesta para que alguien nos pudiera atender en el Serviu, dos meses y ya comenzábamos a impacientarnos.

A las 9ºº hrs. de la mañana comenzábamos a concentrarnos en nuestra población, en nuestro cerro, los rostros decididos de las pobladoras con sus hijos en brazos alimentaban las esperanzas de lograr nuestros objetivos: ser escuchados por el director del Serviu y poder entregarle nuestro petitorio que constaba de cuatro puntos, los mismos cuatro puntos que se entregarían una hora más tarde en Santiago: compra de terrenos, construcción de viviendas dignas, subsidio efectivo, creación de mesas técnicas para acelerar los procesos.

A las 9:30 hrs. no faltaba nadie, estábamos todos. Juntamos las monedas para bajar al “plan” y comenzamos nuestra travesía. Las miradas en la micro se cruzaban y se daban apoyo.

Llegamos al Serviu y nos encontramos con la bienvenida: dos micros de pacos, un guanaco y un carnicero. La represión de siempre, los vigilantes de los poderosos que pretenden intimidarnos con sus armas, pero no lo lograron. Desplegamos nuestros lienzos a las 10:15 hrs. y comenzamos con las consignas.

A las 11ºº hrs. nos cansamos de gritar y que nadie nos saliera a recibir, nuestros dirigentes habían entrado y salido un par de veces y nada sucedía, así que decidimos entrar, decidimos ocupar los espacios públicos, nuestros espacios para que el eco de nuestras voces unidas, sonara más fuerte y nítido. Y como por arte de magia alguien nos recibió. Conseguimos zanjar una reunión con el director del Serviu para crear una mesa técnica y así avanzar en la anhelada solución.

Es cosa de ponerse a pensar y nos daremos cuenta de que lo que no logramos conseguir por medio del conducto regular en dos meses, pudimos hacerlo con una hora y media de movilización, es decir, sólo la presión a la autoridad por medio de la acción directa no permitirá lograr nuestros objetivos. Los poderosos se vendan los ojos para no ver la pobreza y así hacernos creer que no existe, que tenemos un país que crece a diario, un país que compra armas, que pone computadores en los colegios y que hace caminos, que pone cámaras de seguridad para hacernos sentir seguros; pero a nosotros que vemos y sentimos a diario la pobreza no nos pueden engañar.

Sabemos que este es una país en donde lo único que existe y se siente no es la seguridad, sino la pobreza y la marginación, que el único top ten que existe no es el Massú, ni el González, sino Chile en desigualdad de repartición de las platas del país. Por esto y mucho más decidimos movilizarnos y protestar, porque ya estamos cansados de que nos pasen a llevar, porque sólo con la fuerza de todos nosotros, con la fuerza de los pobres, construiremos dignidad.



por Comité de Allegados "Vivienda Digna", Viña del Mar.

En Viña del Mar, otro Comité en Lucha

Parece ser que mientras más plata hay en Chile, menos nos toca a quienes la producimos, es decir, a los trabajadores. Ya ni migajas nos caen de la mesa de los ricos, y es que la avaricia de los de arriba no tiene límites.

En Viña del Mar hay terrenos de sobra, es cosa de mirar para el lado y uno se da cuenta de que existen terrenos buenos, o sea, terrenos cerca de nuestras mismas poblaciones, cerca de los colegios de nuestros hijos, cerca de los consultorios, en nuestros mismos cerros, pero parece ser que el gobierno no los ve.

La problemática de la vivienda en la V región es de carácter grave, así lo demuestra la existencia de más de 150 comités de vivienda sólo en la comuna de Viña del Mar, además de la innumerable cantidad de tomas de terreno en casi todo los cerros de esta comuna. Para qué hablar del resto de la región donde la situación es la misma. Sin embargo, la cantidad no quiere decir calidad y pese a que existen hartas instancias organizativas no existe la determinación de luchar en conjunto por el derecho a la vivienda.

Nuestro comité surge de la necesidad de UNIR LAS LUCHAS que se dan de forma separada en nuestra región y pese a los escasos meses que llevamos trabajando, la experiencia de las pobladoras y pobladores ha encaminado correctamente el rumbo de nuestro accionar, esto se demuestra en la determinación de los socios de nuestro comité a la hora de movilizarse contra la Municipalidad de Viña por el cobro de 10UF más de lo mínimo que exige el MINVU. En esa ocasión nos topamos con la prepotencia de la alcaldesa UDI Virginia Reginato (apodada Ballenato por su tamaño) quién tal cual patrón de fundo nos quiso echar de la municipalidad gritándonos que “en su casa no permitía protestas”. Bueno, se quedó con los crespos hechos ya que nos quedamos y exigimos una reunión con los encargados del Área de Vivienda y la DIDECO (Dirección de Desarrollo Comunitario), la cual logramos, terminando con el compromiso de que nos apoyarían en todo lo que fuera posible.

Este pequeño avance, este pequeño triunfo concreto nos mostró que el camino elegido era el correcto, que sólo movilizándonos y exigiendo nuestros derechos seríamos escuchados.

Ahora el siguiente paso es movilizarnos para que el Serviu compre o expropie los terrenos necesarios para poder construir nuestras poblaciones, pero esto no lo podemos lograr solos como comité y es por eso que nos unimos en la lucha nacional de los “sin techo”, esta lucha que tiene sus antecedentes allá por los años 1900 con la “Liga de los Arrendatarios” y que hoy la encarnamos todos los comités de la “Agrupación de Pobladoras y Pobladores Sin Techo (APST - Chile)”. Es aquí donde ciframos nuestras esperanzas y nuestras fuerzas, ya que sólo la lucha nos dará lo que los ricos nos niegan.


Arriba los que luchan por la vivienda digna!!


por Comité de Allegados "Vivienda Digna", Viña del Mar.
APST – Chile.

Una Crítica a la Política Habitacional Neoliberal

Para la reconstrucción de un movimiento poblacional ligado al tema de la vivienda, es necesario precisar la forma que asume el neoliberalismo en la Política Habitacional del Estado y actual gobierno, y a partir de esta premisa poder elaborar una política que de cuenta de los requerimientos y aspiraciones históricas que los pobladores necesitamos para la construcción de una vida digna para todos y cada uno de nosotros/as.

Es preciso definir claramente desde dónde construiremos esta nueva política, ya que no es lo mismo que la asuma la Concertación o la Derecha, transformándose en un desafío para quienes desde el campo popular pretendemos levantar una política habitacional coherente con las necesidades de nuestro pueblo.

La política habitacional de los gobiernos de turno y sus socios:

- El Estado: ha asumido una función solamente subsidiaria que favorece a la política neoliberal.

- Las grandes inmobiliarias y empresas constructoras: han definido altos precios del metro cuadrado construido por vivienda, a un valor aproximado de 7 UF el m2 ($125.000).
A pesar de que el gobierno ha aumentado los subsidios de 140 a 280 y 320 UF en algunas comunas de Santiago para los programas Fondos Concursables, este aumento del subsidio sólo ha servido para incrementar las ganancias de los especuladores de las empresas constructoras y de las grandes inmobiliarias, manteniendo la precariedad de la vivienda social que se entrega, lo cual, obviamente, no ha significado un beneficio para los sectores populares.

- Los dueños de los terrenos: especuladores que cada vez que hay un aumento de los subsidios para los sectores populares elevan los costos del m2 de tierra, lo que no nos permite quedarnos en nuestras comunas de origen y si lo logramos es a costa de la calidad de vida, ya que el alto costo del terreno lleva a que los pobladores tengan que ser arrinconados en periféricos y pequeños sitios de 28 m2 construidos de vivienda, llevando esto, a que en el futuro se sumen problemas sociales.

- La banca privada: a pesar de que hay programas que son denominados “sin deuda” para los sectores que no tienen acceso a la banca privada, éstos no alcanzan al conjunto de los pobladores(as) y trabajadores(as) pobres de nuestra larga y angosta franja de tierra llamada Chile, ya que la ley define una línea de pobreza que es medida con instrumentos inadecuados, como la ficha de protección social, (ex ficha CAS), permitiendo de esta manera, que trabajadores(as) que no tienen recursos para endeudarse, tengan que mentir sobre su verdadera condición económica para poder acceder a los créditos bancarios que le permitan comprar su ansiada casa propia, y en un futuro deben enfrentar la cruda realidad de no poder pagar los dividendos y los intereses usureros que el banco les impone, situación que les lleva a ver cómo su sueño es rematado por el banco .

Sistema neoliberal: modelo económico implantado en Chile por la dictadura militar, y administrado estos 16 años por la Concertación. Este modelo no es otra cosa que la privatización de los servicios públicos, lo cual implica la fragilidad y al mismo tiempo la exclusividad del uso de los servicios básicos (para aquellos que tienen el dinero para adquirirlos) de una sociedad: salud, vivienda, educación. Teniendo como consecuencia la desigualdad social para los hombres y mujeres de una sociedad.

domingo, agosto 27, 2006

¿Nueva Política Habitacional?

Acerca de la “Nueva Política Habitacional” anunciada por el Gobierno.
Hace ya un par de semanas, tras el escándalo que produjo el caso de las viviendas de 12 m2 entregadas por el gobierno en la comuna de Malloa (Rancagua), nuestras autoridades anunciaron la presentación de un nuevo decreto de ley, que daría pié para el desarrollo de una nueva Política Habitacional de Mejoramiento de la calidad e Integración Social.

Hasta la fecha, las soluciones habitacionales que se habían entregado denotaban una clara focalización del gobierno hacia la cantidad de viviendas (para reducir el déficit habitacional) descuidando totalmente el aspecto cualitativo. Vale decir, la calidad de las viviendas que se asignaban a los pobladores era tremendamente baja y la localización de éstas, siempre en la periferia de las ciudades, los relegaba a una situación de permanente carencia de servicios y equipamientos, manteniéndolos al margen de los espacios de educación, cultura, salud, participación política, etc.

El anuncio del gobierno se enmarca dentro de este contexto, y manifiesta que su preocupación ya no será tan sólo la cantidad, sino también “garantizar la calidad de las viviendas, mejorando su estándar y los procesos de diseño y construcción”, además de “promover la integración social, procurando soluciones habitacionales insertas en barrios y ciudades”. En términos concretos, se propone, entre otras cosas, aumentar el subsidio habitacional en 50 U.F. (lo que permitiría agregar un dormitorio más) y otorgar un subsidio diferenciado a la localización de las viviendas, es decir, un subsidio que permitiría acceder a mejores suelos para la vivienda social.

Si bien, a primera vista, este anuncio puede parecer muy beneficioso, existen algunos puntos sobre los cuales debemos llamar la atención.

En primer lugar, es necesario mencionar que la “Política Habitacional” es el espacio donde se encuentran los distintos sectores sociales que deberán definir la situación habitacional de nuestra población. Si comparamos la “antigua” política habitacional con la “nueva”, veremos que en este espacio se siguen encontrando los mismos sectores de siempre (autoridades gubernamentales, empresas constructoras, propietarios de terrenos, etc.) y, por lo tanto, los mismos intereses de siempre. Los eternos ausentes siguen siendo los pobladores, los que deben sufrir las decisiones, pero no tomarlas. La escasa y nula posibilidad de participación de los pobladores ha sido uno de los principales problemas de nuestro país en materia habitacional, lo que ha derivado en soluciones que no responden a las necesidades de nuestra población y que no hacen más que aumentar sus costos de vida y reproducir la pobreza. Sin embargo, la propuesta del gobierno no hace mención alguna acerca de esto.

En segundo lugar, si el gobierno quiere hablar de “calidad” de las viviendas sociales, entonces, habría que comenzar por la definición de éstas. La vivienda social, en nuestro país, no está definida por criterios de habitabilidad (como es el caso de cualquier otro recinto que se quiera diseñar), sino tan sólo por criterios económicos. No existen criterios ni requerimientos de dimensionamiento, iluminación, soleamiento, ventilación, etc.; que establezcan un límite a la especulación de las empresas constructoras. Establecer criterios de habitabilidad -que nazcan de un trabajo conjunto entre pobladores y profesionales- es una tarea fundamental para lograr una mayor coincidencia entre las viviendas que se entregan y las necesidades reales de nuestra población.

Por otra parte, podemos confiar en las buenas intenciones del gobierno, de querer entregar viviendas de no menos de 38 m2, pero hay aspectos fundamentales de las políticas habitacionales que condicionan en última instancia las voluntades de las autoridades. No debemos olvidar que quienes construyen son las empresas constructoras privadas y los suelos para construir se encuentran, en su gran mayoría, también en manos privadas (los terrenos del SERVIU no son ni abundantes ni amplios). Esto implica que cualquier voluntad del Gobierno se encuentra, finalmente, a merced de los costos de construcción que definen los empresarios y a merced de los valores de suelo que establecen los propietarios especuladores de terrenos. Son estos costos de construcción y estos valores de suelo los que determinarán la calidad constructiva de las viviendas, su superficie, su localización, etc. La propuesta del gobierno no menciona ningún mecanismo concreto de control y regulación sobre el sector privado para evitar un alza desmedida de dichos precios. De esta manera, el aumento en el monto del subsidio habitacional que se propone está destinado a convertirse en negocio redondo para empresarios y propietarios de terrenos, quienes podrán exigir mayores cantidades de dinero por construir y vender sus suelos, asegurando que una buena parte de los subsidios de nuestra población vayan a parar a sus propios bolsillos.

Para terminar, debemos aclarar que esta nueva propuesta de política habitacional que se anuncia no es una iniciativa que nazca de las buenas intenciones de nuestros gobernantes, sino el resultado de un largo proceso de lucha que han generado distintos actores populares (allegados, pobladores sin techo, deudores habitacionales, etc.) exigiendo dignidad y recuperando poco a poco su capacidad de determinar su propia vida. Es evidente que no resuelve los problemas fundamentales, pero sí abre nuevos caminos y potencialidades para las organizaciones que luchamos por el derecho a una vivienda digna para nuestra población, caminos que deberemos enfrentar con la firme convicción de que sólo luchando seguiremos avanzando hacia la construcción de una política habitacional que garantice la vida digna y no busque explotar las necesidades de los pobres.
por Yves Besancon

Declaración a la Opinión Pública

Somos la Agrupación de Pobladoras y Pobladores Sin Techo de Chile (APST-Chile), que reúne, organiza y coordina a pobladores/as concientes de sus necesidades de techo digno; necesidades que rescatamos del pasado histórico de luchas que nuestro pueblo ha realizado para alcanzar una vida plena.

Convencidos/as de esto, es nuestro deber como pobladores/as llevar a la práctica las acciones necesarias para buscar soluciones dignas, no sólo en el ámbito de la vivienda, sino en todos los aspectos que como pueblo pobre nos han sido negados. Sin embargo, la vivienda es un tema central en nuestra lucha, por ser el espacio que toda persona requiere para desarrollarse.

Como todos/as han podido dar cuenta a través de las noticias y de la observación directa de la lucha de los sin techo; el Estado chileno no ha querido asumir su responsabilidad ante uno de los derechos que le asiste a todo habitante de este país: vivir bajo un techo digno. Traspasando esta responsabilidad al mercado y a los privados, por medio de los planes de vivienda social “sin deuda”, donde prima el nivel de utilidad de las empresas constructoras, por sobre la calidad de la vivienda y el entorno a habitar. Esto contribuye a aumentar los niveles de segmentación de la población, generando un verdadero banco para la crianza de todo aquello que nos denigra como pueblo (delincuencia, drogadicción, violencia intrafamiliar, etc… asuntos que no deseamos). Pero casas pequeñas donde el patio es la calle, sumado a las escasas oportunidades de educación, de salud y trabajo, van creando el escenario marginal para que tales asuntos se permitan.

Tras el abandono por parte del Estado y la asunción de las empresas privadas que miran la vivienda como un negocio rentable para sus bolsillos, los únicos perjudicados somos los pobladores/ as que por no ser sujetos de crédito, creen que debemos conformarnos con viviendas estructuralmente débiles y pequeñas, lo que sólo fomenta el hacinamiento y la escasa privacidad; construcciones en los peores suelos urbanos de la periferia, en comunas en donde no hay trabajos en los cuales desempeñarnos, donde no hay escuelas para que vayan nuestros hijos, donde no hay consultorios ni el equipamiento necesario para el esparcimiento y recreación, todo lo cual transforma a estas áreas en entornos inseguros. A estas malas condiciones de habitabilidad se suman las malas condiciones de evacuación de aguas lluvias, de aislación térmica y acústica, llevando a un deterioro acelerado de la vivienda, con limitaciones para crecer y construir espacios urbanos sustentables en el tiempo.

Como Agrupación buscamos responsablemente generar cambios en las políticas habitacionales que no nos han favorecido ni favorecen, para así establecer barrios y comunas que recojan el pasado histórico de nuestras ciudades, con personas comprometidas con el desarrollo económico, político y social de su entorno; buscamos ser artífices de unidades vecinales que tengan como centro el valor del sujeto solidario y activo, que mira al porvenir como una construcción realizada por todos/as, y no como una consecuencia de la asistencia por parte de las llamadas autoridades. En nuestra acción reconocemos al poblador/a como el sujeto que realizará el sueño de la vivienda digna, aspirando a la construcción de barrios donde la participación popular se exprese en todos sus rincones.

En lo concreto estamos trabajando en una propuesta arquitectónica de viviendas económicas de calidad, con una densidad de barrio amable que otorgue las condiciones necesarias para acabar con el hacinamiento, por tanto, apuntamos a viviendas flexibles al crecimiento. Apuntamos a generar poblaciones en medio de un entorno expedito a las fuentes laborales, consultorios, escuelas y espacios para la recreación, es decir, buscamos crear un entorno sustentable en el tiempo y que, a su vez, vele por la protección del medio ambiente.

Nuestro compromiso busca elevar la calidad de vida en los centros urbanos, obligando al Estado y a los gobiernos de turno a asumir la responsabilidad que les compete, ya que estamos convencidos/as de que estamos en condiciones para decidir cómo queremos seguir viviendo. Para el desarrollo de nuestro proyecto es indispensable generar las condiciones que nos permitan, en conjunto con otras organizaciones que se encuentran peleando, terminar con el sistema neoliberal. Este sistema que guía las políticas habitacionales del Estado, no sólo nos afecta a nosotros/as como allegados/as o arrendatarios/as, sino a una gran mayoría que hoy se encuentra excluida, como los hermanos de clase que hoy se esfuerzan peleando por un sueldo digno; nuestros niños y jóvenes que luchan por una educación de calidad; los miles de deudores habitacionales que se encuentran en pie para que el sueño de la casa propia no les sea rematado; los mineros que luchan por seguridad en sus trabajos; los pescadores artesanales a quienes les restringen las áreas de pesca, es decir, su fuente laboral; los cesantes; los mapuches que incansablemente han peleado para que sus tierras no les sean arrebatadas...

Nos comprometemos a realizar los esfuerzos necesarios para construir los puentes de acceso a la articulación de todos los/as luchadores/as sociales que se encuentran en alza y desde ahí generar la unidad.